Te hecho de menos.

Unas pocas horas son más que suficientes para que ya me encuentre mal. Si tu no estás el día deja de ser perfecto. Luego dices que no te quiero o no te quiero lo suficiente, pero te aseguro que nadie sentiría por ti este vacío como lo siento yo cuando estás lejos. Me dices que entonces no podría irme de viaje porque no estaríamos juntos, pero yo sé que si, porque me haría a la idea, de la felicidad que invadiria mi corazón cuando regresara y te pudiera ver, pero, ¿qué hago aquí sola, sin amigos ni familia, sin poder verte? Se me quitan las ganas de comer, de salir, de hablar, de hacer nada; las horas se hacen eternas cuando lo quiero es que pasen más rápido para estar cerca, a tu lado. Siento una depencia total y nada sana, que me invade, que no me deja pasear con libertad a lo largo del tiempo, solo pienso en la cuenta atrás. Me destroza que me digas que hoy no quieres quedar, que quedamos más tarde... que alargas el tiempo para no verme, para pasar más tiempo solo y que luego no caigamos en la rutina de la pareja... estereotipos. Parece que tienes miedo, por ti, por mi, por las cosas que dicen la gente; parece que no dejas tu mente libre, siempre atado a los que es y lo que no es...

Vamos a dejar nuestro corazones que se imanten, que nuestras bocas se cosan, que nuestros cuerpos suden, y que nuestras manos se hagan UNA. No quiero quenos separemos, no quiero que dudes de si te quiero o no te quiero, no quiero que me hables nunca más de rupturas, no quiero que me hables de futuro, no quiero que me hables de la gente; solo quiero que me quieras, que me dejes estar contigo para siempre, que seas feliz conmigo, queme dejes expresar lo que siento sin condiciones, que seamos solo tu y yo y se cree un mundo a nuestro alrededor donde nadie pueda entrar a molestar.

Rompe la barrera del miedo y de la inseguridad, yo ya estoy lo suficientemente segura de que te quiero aquí conmigo para siempre, no lo pienses ni un minuto más, ocupa tu tiempo en otras cosas, en estar conmigo... Ojalá pudieras leer esto ahora, y venir corriendo a por mi para irnos lejos y olvidarnos de los problemas, escapar a algún lugar apartado de la negatividad y lo gris que invade cada día un poquito más al mundo. Pero no, en vez de eso, tu estas allí... y yo estoy aquí muerta del asco, con dolor de tripa, con ganas de llorar, con nada que hacer y demasiadas cosas que decir como para seguir escribiendo... vuelve pronto a mis brazos.