Un solo gesto se me queda grabado en la cabeza y lo conservo como un tesoro. Me recorre el cuerpo un cosquilleo que desemboca en sonrisa. Ha tomado peso y forma, una forma que ha evolucionado rápido. De la mayor normalidad aparente surge una rareza positiva, que me encanta. Me siento tranquila, una balsa de agua.
Me quedo con el presente, vivo el hoy, que es lo que tengo entre mis manos, lo que puedo manejar. Me gusta que me sea difícil, que no conteste a mis preguntas, que tenga que entresacar información. Vive rápido. No tiene miedo a nada, parece imbatible, resistente.
Y no había prisa por ir más allá. Tiempo y espacio. Vivir callada, pensando y sonriendo. Vivir de manera autónoma e independiente. Quiero poder perderme; perderme en el mundo es algo que siempre he soñado. Sorprenderme de las cosas. Aprender. Alguien que me acompañe. De cualquier manera, sin etiquetas, sin prejuicios, sin quejas, sin condiciones. Fácil pero difícil. Improvisar. Preparada para saber más.
Esto me va a hacer crecer. lo sé, reiré y lloraré, me hará pensar, me permitirá descubrir. Asumo el riesgo de crecer haciendo cosas que nunca he hecho. Con 20 años no se es mayor. Como yo. No estoy asustada, quiero vivirlo.
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